Descripción
Apareciendo en 1968, el 500 L era la variante de lujo del Fiat 500. Estaba equipado con paragolpes reforzados, pero lo más importante era que su interior se renovó. El tablero de instrumentos estaba completamente recubierto, los medidores tomados del Fiat 850, los nuevos asientos eran más cómodos y el respaldo de la silla podía reposicionarse manualmente. Esta versión fue un éxito comercial, convirtiéndose en el modelo de producto más grande de los 500. La mitad de su producción se exportó, por lo que este coche es un verdadero ícono de Italia.