Rallye de Granadilla 2003
Llegábamos al ecuador del campeonato, por lo que, era muy importante ganar este Rallye después de la victoria de Oliver en el Rallye Gran Canaria.
El primer tramo de Atogo era clave para comenzar el Rallye puesto que es un tramo difícil con muchas trampas. Corría todo lo que podía para intentar sorprender a Oliver. Al llegar a meta, bajaba en cuatro segundos mi tiempo del pasado año. Tras pasar el control stop me paraba para ver que tiempo hacía Oliver y lo veía llegar a meta muy retrasado y con un neumático en llanta e incluso, David lo adelantaba.
El segundo tramo, La Orchilla, lo hacía muy tranquilo, sabiendo que la diferencia con Oliver era muy grande. Al llegar a meta, mejoraba en seis segundos mi tiempo. Después del control stop me volvía a parar para ver el tiempo de Oliver, pero era David el que llegaba y al preguntarle me comunicaba que Oliver se había salido de la carretera.
Se llegaba al primer parque de trabajo y decidía montar neumáticos usados para el siguiente bucle.
Arico lo hacía sin cometer errores y cambiando el motor 1.000 vueltas por debajo del corte, marcaba el mejor tiempo.
En Granadilla me encontraba en una curva a un chico sacándome la bandera amarilla, levantaba el pie pensando que pasaba algo y al pasar la curva, todo estaba bien, creo que el pive estaba muy animado. En meta lo comentaba a la organización.
La asistencia se realizaba sin problemas y volvía a montar neumáticos usados ya que la diferencia con el segundo era de unos 21 segundos.
Se repetía el tramo de Atogo y empeoraba 4 segundos, no podía cometer errores y había que terminar intentando castigar lo menos posible la mecánica.
En la segunda pasada por la Orchilla, la organización cambió la salida del tramo ya que en la primera pasada la habían adelantado por error. Empeoraba 6 segundos y marcaba el segundo mejor tiempo por detrás de mi buen amigo, Ricardo Ledesma, con mi antiguo Galant Vr-4 que estaba haciendo un gran Rallye.
En el tercer parque de trabajo se seguía con el mismo planteamiento, ruedas usadas y seguir cambiando por debajo del corte de motor.
Tengo que reconocer, que en Arico-2 me dormía muchísimo, con el miedo de cometer algún error y hacía 6º en el tramo, aunque no significaba nada para la general, pues la diferencia con el segundo era importante.
En Granadilla-2, con mucho calor y neumáticos usados, el coche no se comportaba muy bien, aunque no tenia problemas para hacer el mejor tiempo, eso si, peor que en la primera pasada.
En el parque de trabajo se revisaba el tren trasero y se encontraba una holgura en las rotulas del puente pero que no nos tenia que preocupar para los dos últimos tramos.
La última pasada por Atogo impresionaba de ver las frenadas de los coches que se habían salido, seguía administrando la diferencia y marcaba el mejor tiempo. Ya sólo quedaba pasar Arico.
En Arico-3 era de puro tramite y seguía cambiando 1.000 vueltas menos, aunque el último tramo se me hacía larguísimo. En meta felicitaba a mi copiloto Rubén y al llegar a la asistencia, a todo mi equipo, ya que habíamos dado un paso importantísimo para el campeonato que ahora se pone muy a favor del Skoda.
Saludos y hasta el próximo rallye.
Antonio Ponce